El éxito no existe…”¿Cómo que no existe?..Entonces, ¿por qué el artículo se llama Vincúlate con el éxito?» Me explico…
Se habla mucho de éxito, de cómo ser una persona exitosa, cómo acercarte al éxito, cómo vivir con éxito…Estoy segura de que has leído, oído y hablado en varias ocasiones del tema, pero, deja que te haga una pregunta: ¿qué es el éxito? o más concretamente: ¿qué es para ti el éxito? Es muy posible que el concepto que tú tienes del éxito no se parezca al mío, ni al de tu vecina, o tu amiga, tu pareja…Más allá de la definición académica -que no me parece útil en este momento- para cada persona el éxito pueden ser cosas muy diferentes. Puede ser tener mucho dinero, mucho tiempo libre, ser el primero en la empresa, tener muchos amigos, una vida acomodada…Por este motivo es por lo que digo que el éxito no existe…a no ser que tú le des un sentido, TU sentido (no el de nadie más). Por lo tanto, desde mi experiencia, lo primero que hemos de hacer para hablar de éxito y máxime, para acercarnos a él, es saber y tener muy claro, qué es para ti el éxito.
>>Te animo a que antes de seguir leyendo, en este momento, ¡ahora! 😉 te tomes dos minutos y escribas ‘¿qué es para ti tener éxito en tu vida?’. Te puede ayudar imaginar un día en el que te veas como esa persona exitosa…Verás que te será más útil el artÃculo y la pequeña reflexión en sí>> Una vez hecha ésta, continuamos…
Si bien es cierto que no hay una interpretación del éxito universal, por mi experiencia propia, si sé (a ciencia cierta) que existen ciertas habilidades, prácticas y claves que pueden acercarte a tener éxito en tus objetivos y tu vida, sea cual sea tu definición propia, y con este artículo quisiera compartirlas contigo…¿Te gustaría conocer la 6 llaves que te ayudarán a abrir las puertas del éxito?
El venir a vivir a México y las experiencias vividas durante el viaje y el gran cambio que esto supone, me han servido para revivir, revisar y poner en práctica estas claves una vez más…Llaves maestras que llevo siempre en mi llavero y que me vinculan con el disfrute y el éxito, sea cual sea el objetivo o la meta en la que deseo triunfar.
Considero antes de empezar con las tres primeras claves, que es importante ser consciente de que el éxito es cambio (requiere en la mayoría de los casos hacer muchos ‘algos’ diferentes o nuevos…) y el cambio aunque apasionante y del todo enriquecedor, siempre te saca de ‘tu tiesto’, de aquello que controlas. Esto quiere decir en definitiva, que todos los cambios requieren de un tiempo de adaptación, el tiempo final depende de la persona y de las habilidades, sin embargo en mayor o menor medida, todos y repito, todos necesitamos de un mínimo tiempo que NO podemos saltar, aunque sí acortar…para esto las claves que te comparto.
Te sugiero que no luches en contra de las fases emocionales del cambio, esto es como nadar contracorriente, porque lo natural es que las atravieses y eso te puede generar más agotamiento y frustración. Simplemente, conócelas (las adjunto en el cuadro a continuación y las trataré con más detalle en otro artículo) y acepta que atravesarás ese camino que, con el ojo entrenado y actitud ‘de disfrute’, te surtirá de muchos aprendizajes en cada una de las paradas (fases).
Vamos allá con las tres primeras llaves maestras (habrá una segunda parte para completar las otras tres, así te dará tiempo a ir convirtiéndolas en tuyas):
1- ¿Sabes con quién estás hablando?:
Cuando te enfrentas a situaciones en las que el miedo y el estrés se suman y se alargan en el tiempo, se puede pasar por una especie de ‘crisis de autoestima’ o de identidad (bien entendido a lo que me refiero, por favor, nada extremo ni patológico). Hay situaciones que, en ocasiones te hacen dudar de ti o de tus habilidades, ya que estás en un contexto desconocido y eso nos hace vulnerables…¿Te ha pasado alguna vez? Para minimizar esa sensación y el estrés que esto conlleva, conviene tener muy claro quién eres y con quién hablas (lenguaje interno contigo) y por supuesto, cómo te hablas, aunque eso lo comentaré en el tercer punto.
Cuáles son tus fortalezas, tus talentos, tu potencial, aquello que quieres y que no quieres, para que ninguna situación ni persona te haga dudar y tengas mantengas el foco en las metas y objetivos que deseas. Recuerda que eres lo que eres, lo que tú decidas que eres, no lo que nadie quiere que seas, ni lo que fuiste, ni lo que crean que deberías ser, ni si quiera la persona que serás, eres quien y lo que eres hoy…
2- Acuérdate del bambú:
«¿Por qué el bambú?» Es muy interesante conocer los beneficios y características del bambú, te invito a que investigues un poco sobre él (Puedes ver y descargar esta ppt sobre el bambú) En este punto concreto, destacaré dos de ellas: 1- la paciencia: El bambú no crece nada los 7 primeros años y al séptimo, ¡crece 30 metros en 6 semanas! (dejo a tu criterio las conclusiones) y 2- La flexibilidad: El bambú no se quiebra ante los vientos, se adapta. Adáptate a lo que estás viviendo. Nada es bueno ni malo en su totalidad. No hay ‘siempres’ ni ‘nuncas’ eternos, ni fríos ni calores absolutos…acostúmbrate a deshacerte de los polares (polos opuestos) tipo ‘nunca me acostumbraré’ o ‘todo lo malo siempre me pasa a mi’ porque no es real…¿Nunca jamás te acostumbrarás? ¿El 100% de las veces lo malo te pasa a ti y a nadie más?…creo que no.
Este tipo de afirmaciones absolutas nos hacen rígidos y te alejan del éxito. Si piensas que siempre tienes mala suerte, o que no vales lo suficiente, no te das permiso para cambiar aquello que piensas y te seguirá pasando porque así lo crees (creer crea realidades)…»Sé bambú my friend» 😉
3- ¿Qué tienes en la cabeza?:
Lo que pensemos determina lo que sentimos y por tanto al final, lo que hacemos o no hacemos o decimos o no decimos, por lo tanto hay que ser muy conscientes de qué están hechos nuestros pensamientos. Esto no es coser y cantar, lo sé. No sería real que te dijera que ‘hay que pensar en positivo’ y ya está, solucionado, sin embargo sÃí que sirve y mucho, tomar consciencia de los pensamientos que tenemos que no nos dejan conseguir el éxito o nos alejan de él, y someterlos a revisión para ver el grado de ‘realismo’ (sobe todo utilidad) que tienen.
Por ejemplo: Si pienso, ‘es que, que me llamen en México para dar una conferencia es imposible (irreal, ¿en ningún momento si yo ‘hago lo que hay que hacer’ me llamarán?) porque quizás ya hay muchas personas que se dedican a dar conferencias y…bla bla bla…’ Con este pensamiento ya me estoy poniendo obstáculos y límites a mi misma antes de ni siquiera haber hecho nada para que me llamen para dar una conferencia. Si me digo y tengo el pensamiento limitante de que es imposible, estoy derrochando energía innecesaria, lo veré imposible porque así lo creo y probablemente convierta la situación en profecía auto-cumplida, y haré que sea imposible, ¿lo ves?.
Te invito a que estés alerta durante unos días con aquello que tienes en la cabeza y cómo te estás contando las cosas y que cuando te pilles en uno de esos pensamientos que ni de cerca te vinculan con el éxito, lo escribas y veas si hay absolutismos (siempre-nunca, malo-bueno…) y la manera en la que puedes hacer que esa creencia te sea útil que al fin y al cabo es lo que te hará avanzar. Pide ayuda a alguien cercano si te cuesta al principio, te será muy enriquecedor además compartir los puntos de vista con otra persona…Esto también requiere de flexibilidad para contigo así que recuerda, ’Sé bambú my friend‘…
Deseo que te sean de mucha utilidad estas claves-llaves y que las hagas tuyas para comprobar que te abren las puertas del éxito. Me encantará que compartas los triunfos en los comentarios. Y…además de ‘ser bambú, sé happy my friend‘ 🙂